miércoles, 23 de diciembre de 2009

un widget de Facebook

Facebook, originalmente exigía un correo universitario para sacarse una cuenta. Porque era justamente eso; un Facebook, un perfil con foto donde los universitarios pudieran compartir información. La demanda causó que poco a poco fueran cayendo las restricciones, y no pasó mucho tiempo antes de que se volviera una red social con millones de usuarios alrededor del mundo.

¿La clave de su éxito? Debe haber por allí centenares de artículos, blogs, twites y demás hablando de ello. Pero de inicio, una de sus características más notables, fue que facilitó a los desarrolladores crear aplicaciones para que los usuarios pudieran llevar a cabo las más diversas tareas. El no requerir demasiado conocimiento para crearlas, hizo que éstas llegaran por montones; de acuerdo, no todas lograban ser —como mínimo— interesantes o divertidas, pero poco a poco fueron mejorando. Así, llegaron aquellas que ya tenían todas las características de un juego en línea.

Si bien el jueguito verde te permite ser el administrador de un Club de Fútbol, los jueguitos de Facebook te permiten ser el administrador de una granja, un restorán, un zoológico o un parque de diversiones isométricos, tener mascotas virtuales, meterte en una guerra de mafias o cualquier cosa que se te ocurra. Como juego, el invento sueco les lleva años luz de distancia. Basta jugar cualquiera de los anteriores, para darse cuenta que no hay ese equilibrio (aprendido con el tiempo, desde luego) que el producto estelar de Extralives AB posee: Quienes deciden pagar no tienen ventaja sobre los que no, la competencia entre usuarios es más ardua, los que llevan más tiempo no necesariamente son los que están en los niveles más altos, y es absolutamente menos demandante; Y por supuesto, las complejas y elaboradas interfases gráficas basadas en flash que emplean la mayoría de ellos, siguen sin acercarse siquiera a la emoción de un partido crucial en sólo texto.

Sin embargo, y con 12 años en su haber, el truco de chistera lleva un par de años tratando de alcanzar su primer millón, mientras que únicamente la granjita, ya rebasó los 50 millones de jugadores. No es para sorprenderse, si consideramos que está dentro de una red social con 300 000 millones. Es completamente lógico que la gente en Suecia, siga prefiriendo calidad que cantidad de usuarios. Lo que sí me sorprende, es que vean las barbas del vecino cortar, y sigan complicando tanto la labor de desarrolladores externos, y en general, estén más ocupados cambiándole decimales al motor, que pensando en mejoras para su comunidad, que con todo y todo, le es incondicional. Con todo y que seguramente no lo harían mejor, me aterra el día que a Zynga o a Playfish se les ocurra crear un juego de futbol. A extralives también debería.